Muy a menudo nuestras sociedades intelectuales tienen una asombrosa propensión a juzgar negativamente su pasado. Para ellas lo medieval, por ejemplo, da vergüenza, es detestable; y lo «feudal» es todavía más indignante. Ello es consecuencia, en buena medida, de la imagen forjada a propósito de la Edad Media por numerosos historiadores y escritores de los dos últimos siglos. De acuerdo con esa visión, la época medieval tendría como características más señaladas el retraso y el oscurantismo. Este libro del profesor Jacques Heers sale al paso de esa concepción de lo medieval para lo cual pasa revista a cuatro temas clave: la contraposición entre Edad Media y Renacimiento, el feudalismo y los derechos señoriales, los campesinos o la leyenda negra, y la actuación de la Iglesia. Apoyándose en sólidos argumentos fruto de un conocimiento exhaustivo y crítico de las fuentes, Jacques Heers llega a la conclusión de que la imagen negativa de la Edad Media fue fruto, ante todo, de los partidarios del estado centralista y de la burguesía, los cuales acusaron sin piedad y, lo que es más grave, frecuentemente sin fundamento, a todo lo que procedía de los tiempos medievales, urdiendo patrañas descabelladas a propósito de los «terribles señores feudales», de los «campesinos sometidos al más infame despotismo» y de la Iglesia católica «intolerante y represora». Heers, en nombre de un acercamiento a la historia libre de prejuicios, polemiza con esas interpretaciones y defiende la necesidad de matizar o incluso desmentir, a partir de una metodología renovada, las visiones generales, «esas construcciones intelectuales que tanto deben a apriorismos o compromisos».
Jacques Heers es profesor de historia medieval de la Universidad de la Sorbona (París, IV). Entre sus obras principales podemos recordar las siguientes, todas ellas traducidas al castellano:Occidente en los siglos XIV y XV (Barcelona, 1968); Historia de la Edad Media (Barcelona, 1976); El clan familiar en la Edad Media (Barcelona, 1978); Carnavales y fiestas de locos (Barcelona, 1988); Esclavos y sirvientes en las sociedades mediterráneas durante la Edad Media (Valencia, 1989).
Author(s): Jacques Heers, Mariona Vilalta
Year: 1992
Language: Spanish
Commentary: Ver. 1.0
Tags: Medieval, Middle Ages
Cubierta
La invención de la Edad Media
Prólogo
Primera parte. Edad Media y Renacimiento: La magia de las palabras inventadas
1. Sobre el rigor
La historia y las modas
Polígrafos o especialistas
Artificios y convenciones: la elección de los períodos
2. La Edad Media, un fantasma vivo
¿Dónde comenzar? ¿Dónde acabar?
La caída de Roma y los bárbaros
Hacia la era moderna y las mañanas radiantes
Conclusión: el «hombre medieval», una utopía
Los abusos de la lengua, las palabras cómplice
Los tiempos de transición
¿El otoño de la Edad Media?
El flamígero: ¿una dimisión?
3. Los inventores del Renacimiento (siglos XIV Y XV)
El arte de convencer: Petrarca y Boccaccio
El príncipe y el artista, servicios y complacencias
Los humanistas, oráculos autoproclamados del buen gusto
¿Una simple propaganda?
Por la comuna
Contra la barbarie del norte
Contra los griegos de Bizancio
4. El Renacimiento, génesis de un mito
En busca de las palabras: las incertidumbres
¿Un largo silencio? ¿Un largo olvido?
La época de las «luces»: Roma ante todo
El neogótico, expresión de los nacionalismos (siglo XVIII)
El «hombre del Renacimiento»: una moda, un manifiesto
El Renacimiento hoy: un mito con siete vidas
5. Las ideas heredadas sobre el Renacimiento
Una curiosa inclinación en los juicios de valor: la Edad Media, tiempo de torpezas
¿Supone la Edad Media el olvido de la Antigüedad?
Una cultura siempre nutrida de los hechos de los griegos y de los romanos
La producción artística, siempre fiel a la herencia clásica
Renacimiento y Antigüedad
¿Respeto o desenvoltura?
¿Eruditos, coleccionistas o anticuarios?
¿Paganismo o regreso a las fuentes del cristianismo?
Conclusión
Segunda parte. El feudalismo y los derechos señoriales
1. Las ideas preconcebidas
El estado tentacular y sus virtudes
Historia de una literatura de combate
Antes de 1789: los ministros del rey
Los reformadores de las «Luces»
Las borracheras y los discursos de la noche del 4 de agosto de 1789
De Michelet a nuestros días: la anarquía feudal denunciada por nuestros maestros
2. Anatomía de una propaganda republicana
La novela histórica como modo de ensalzar la virtud
Las grandes figuras del pasado: lecciones de civismo
El diccionario increíble
Los destajistas de la pedagogía al estilo de Jules Ferry
3. Exageración y ridículo
El arte de las ambigüedades y la confusión de las palabras
Los tiempos de barbarie
El señor feudal desprecia y humilla al pueblo
¿Siervos o esclavos?
Los ataques contra el honor y la libertad de los hombres
Malos tratos y crueldades por puro placer
Tercera parte. Los campesinos o la leyenda negra
1. Feudalismo y señorío
Una confusión mantenida a propósito
¿Eran los dueños del suelo bandidos o gestores?
Los grandes dominios: beneficios y calidad
Juristas y hombres de finanzas
2. Las sociedades rurales: ¿Dicotomía o diversidad?
El señor ocioso: ¿un error o una descripción fácil?
Oficiales y hombres del oficio; nuevos ricos y usurpadores
Lo que se quería ignorar: El campesino propietario
3. Algunas reflexiones heréticas sobre las condiciones del campesinado
El cliché del campesino vinculado a la gleba
Los niveles de riqueza dentro de la comunidad campesina
Derechos y abusos del tenente
¿Impuestos insoportables?
4. La ciudad y el campo: ¿Dos mundos enfrentados?
¿Libertades? ¿Qué libertades?
¿Quiénes fueron las pioneras? ¿Las ciudades burguesas o las aldeas campesinas?
La vitalidad y los logros de la comunidad rural
El poder campesino
El aire de la ciudad hace libre: una broma, sin duda
Autopsia del «movimiento municipal» en las ciudades
En el origen, ¿se trató de revueltas o de negociaciones?
A fin de cuentas hubo más fracasos que logros
El pueblo en las sociedades urbanas: bajo el yugo de los ricos
¿Paz o masacres?
Vida urbana y señoríos: una simbiosis
La ciudad extendida y el medio rural dentro de la ciudad
Nobles, señores y guerreros dentro de la ciudad
Cuarta parte. La Iglesia: Otras leyendas, otros combates
1. El clero, agente del oscurantismo
Un pueblo de analfabetos
Religión y supersticiones
La Edad Media y la búsqueda de las reliquias
Las devociones «primarias»: la Iglesia medieval o el hombre de todos los tiempos
Milagros y signos del cielo: los temores del año mil
Historia de una invención
¿Quién se benefició de esas leyendas?
2. Libertinos y depravados: La papisa Juana
3. Los combates malintencionados
Los albigenses. Ensayo de análisis político y social
Las guerras de conquista: Toulouse y Nápoles
El norte contra el sur
La Inquisición: exageraciones y olvidos
4. La usura y el tiempo de los tabúes
Negocios y subterfugios
La usura indecente
La colaboración entre judíos y cristianos
Lombardos, cambistas y mercaderes
La Iglesia: ¿sanciones o protección?
Usureros que eran buenos cristianos y buenos burgueses
Conclusión
Índice alfabético
Notas