La música y el pueblo

Trata sobre el folklore y patrimonio musical del pueblo, sus raíces y antecedentes africanos e hispánicos, así como los diferentes grupos étnicos que conformaron la población cubana. De ese modo contiene información sobre la historia de la música cubana desde sus orígenes hasta la actualidad. Además posee ilustraciones, fotos, fragmentos de textos y partituras de los diferentes géneros cubanos. Fragmentos de entrevistas y comentarios de músicos cubanos del siglo XX extraídos de publicaciones seriadas. En general la obra es una síntesis histórica de las distintas músicas que han sonado coincidentemente en una misma época en distintas esferas de la población. La obra está estructurada en veintiún capítulos que versan sobre el ambiente familiar, las canciones de cuna e infantiles, las fiestas, velorios y otras reuniones familiares, el carnaval con sus comparsas, parrandas, coros de clave; el ambiente campesino, cantos de trabajos, fiestas o guateques, así como la música de procedencia africana, permanencia de algunos ritos y música profana derivada de esa raíz; presencia de lo criollo, lo nacional, la rápida evolución musical ya entrado el siglo XX y la música actual. Además, posee una introducción donde la autora ofrece un análisis conceptual del fenómeno folklórico y popularización de las formas musicales elaboradas por el pueblo. En consecuencia los capítulos abordan los antecedentes, los procesos de transculturación, las esferas sociales en que se desenvuelve la música, las influencias foráneas, la influencia de la música cubana en otros países, el decursar histórico y sus efectos. María Teresa Linares. Musicóloga y pedagoga. Una de las prestigiosas musicólogas cubanas de su generación y de las que le sucedieron. Merecedora del Premio “María Teresa García Montes de Giberga” 1958 por su ensayo “Influencia española en la música cubana”. Investigadora de Mérito; Doctora Honoris Causa en Ciencias del Arte; Premio Nacional de Investigaciones Culturales, 1999; Miembro de Mérito de la UNEAC, 2000, y Premio Internacional “Fernando Ortiz”, 2000. En la actualidad se desempeña como Vicepresidenta de la Fundación Fernando Ortiz. Ostenta la Orden “Félix Varela”, máxima condecoración que otorga el Consejo de Estado de la República de Cuba a las personalidades que han realizado extraordinarias contribuciones a la cultura artística y literaria.